sábado, 9 de julio de 2011

estoy escribiendote, una vez más, por que no te entiendo, te descubro y creo que te alcanzo, pero a los cinco minutos, me doy cuenta que no. sigo, mirando árboles, calles, gentes, como esperando que desciendas desde un helicóptero de color flúor. estoy esperando siempre que tu color rojo sea de otro color. que la gente no te relacione con ser colorado. estoy imaginando que alguna vez me pasará de enloquecerte, como lo hice en algunos fragmentos de mi vida. también deliro con saber que existís, que no por algo el mundo está lleno de gente que vive junta y planifica su vida junta. estoy rogando que no me mientas. mientras el mundo se ríe de mi estado de niña y me pega unas cachetadas cuando decido jugarte, cariño. estoy ahí, siempre en el camino de la verdad, porque otra no me sale. no puedo ocultarte cuando dejo de quererte y necesitarte. así soy. hoy estoy, y en tres días ya soy un recuerdo. así fue siempre. así. me gusta jugar con eso. no puedo entregarte mi vida tan rápido. porque así funcionan estas células. algo no funciona cuando la gente me obliga a conocerte. detesto que me citen sin sentido. estoy esperando colgarme de vos, y poder olvidarte al otro día. olvidar cada pedazo del cuento. sentir que te vas. andate, amor, que no es tiempo de que vengas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario